Los que invirtieron en política no han podido recuperar lo invertido.
Entre Manuel Jimenez y su «transparencia», independientemente algunos que le juegan al gato y al ratón (logrando «algo») hasta Luis Abinader con Compras y Contrataciones vigilando a funcionarios, el grifo de los que apostaron al «cambio» para servirse del estado o «robar» que es lo mismo… ha estado complicado.
Incluso, los que «decentemente» invirtieron «logística» solo a veces se tropiezan con alguna que otro grupo de fundas, conectos varios con instituciones, tickets de gasolina o comida, pero es insuficiente, pues algunos de ellos, incluso, regidores, terminaron invirtiendo millones.
En la lista hay desde aspirantes a alcaldes, regidores, diputados y los que apostaron a que ellos salieran para servirse a través de ellos.
El «cambio» llegó aunque algunos no quieran entenderlo… al menos en lo que queda de este gobierno, algunos que están en el podium no tienen en sus planes terminar en la cárcel como Juan Alain e incluso, señalados, por lo que se han desaparecido los grandes eventos repartiendo estufas, lavadoras, refrigeradores y demás, pues las instituciones están limitadas y limitadas, los vigilan a todos, completamente, a todos.
La «política» clientelar derrotada en el 2020 poseía una estructura eminentemente de repartos donde los políticos, conectado a las instituciones, sacaban los productos, los «lavaban» entregados a través de candidatos o aspirantes y estos a través de sus testaferros, muchos de ellos disfrazados de comunitarios, cerraban el círculo del dinero.
En las campañas electorales los aspirantes para reunir personas y dar una charla deben dar «logística» pues, raro pocos ejemplos, casi ninguno logra crear reuniones solo por ser la figura sino que cada silla necesita ser colocada al menos con 200 pesos, sube si es para diputados y se sabe que algun que otro aspirante o candidato a alcalde habria sacado al «ruedo» un monto aproximado de quinientos millones de pesos.
Los candidatos que «invierten» lo hacen porque si logran ser «coronados», en teoría, podrían adueñarse de parte de lo que le toca al pueblo de diversas formas y con ello «sacar» lo «dao» y superar sus fortunas más, pero los tiempos han cambiado tanto que los que desfalcaron el país hace poco tiempo hoy están siendo perseguidos y los que invirtieron no han recuperado.
Los llamados «Pica Pica», que son los que crean «movimientos» para dizque con «logística» llenar los escenarios y hacer «bulto» con banderitas y gritando «ese si es bueno», encontrarán aspirantes que no estarán dispuestos a hacer el juego de «llenar guaguas» porque ya pocos creen en eso.
No obstante… la esperanza es lo único que se pierde y ves en las redes las «guaguas anunciadoras» de antes y los «pica pica» de 500 pesos o más, cazando a los aspirantes que quieran comprar la falsa de que ellos marcan las redes, que anuncian los que «ganarán» y son los que mueven gentes, cuando los propios resultados de las elecciones 2020 demostraron incluso que los que más invirtieron no salieron.
Aun así, el ser humano tarda en entender y se aprecian ya los de siempre, los «mueve gente con necesidad de cobrar» mirando y mirando a ver si algún grifo de los candidatos tipo «billetera» le da por «sacar la cabeza» y «rosear un poco de agua en este mundo que está bien seco».
